¨porque el mundo ya no importa si uno no tiene fuerzas para seguir eligiendo algo verdadero¨ La Maga.

sábado, 27 de marzo de 2010

Si ni todas las joyas de la corona francesa alcanzaron para restaurar los ánimos como para fundar una nueva patria, un hombre nuevo, un cosmos sano

...

el amor sencillamente esta sellado y bien celado por mil demonios… mil demonios que sencillamente no puedo destruir, mil demonios que son más que yo, mil demonios entre los que me encuentro yo, opacado por mis propias llamas; un mojigato suicida envuelto en llamas irascibles, irracionales, insensibles… las llamas de la humana condición.

Adiós querido sueño, adiós… ojala con tanta cruel y dolorosa facilidad pudiera decirle lo mismo al resto de mi andar… que se apiade de mi la parca y no me pida un solo paso mas y que así, el siguiente, no sea el que ha de hacer enterrar en mis entrañas, el pecaminoso puñal…

amor... ELEISON!...kyrie, Eleison!

martes, 23 de marzo de 2010

siete noches para lamentar.

No fue una sino siete, las soledades que llegaron a reemplazar tus ojos en la vigilia de mis noches

No es una sino mil, las agujas las que atraviesan los lóbulos de mi razón y la destejen cada noche, desnudándome al desvarío, a la noche amarga de la perdición del ser mismo, a la orfandad de toda ilusión, al abandono de toda identidad.

Y el silencio no me alcanza para decir lo que reducen mis palabras y la realidad se me hizo corta para no solo dar las gracias, sino siempre para pedir disculpas. Rehúye despavorido el perdón ante tu dolor, y no ante mi miseria, es ante el miedo de tu soledad irreparable, el miedo a que toda esta agonía sea en vano y no haya servido de nada, no te haya servido a ti, el que me pulsa cada noche para permanecer con los ojos cruelmente abiertos como esperando la llegada de tu mirada, con mis brazos dispuestos, con mi pecho desnudo, como esperando que vuelvas arder en mi mas profundo pecho, a reposar en mi, eterno sueño… hada del Nunca, Jamás!

lunes, 22 de marzo de 2010

No de mucho cuenta extrañar,

pero es lo que más vale,

en este momento, para estar.


La vida me es ajena, pero no por completo.

Extrañar a una sonrisa, al sentir unas alas cerca

No significa ni perder la vida, ni que la tienes de vuelta.


La agonía siempre vivirá entre las noches

Entre las sombras, entre los escombros de tantas melodías

En medio de tantas elegías

a las flores, de bosques enteros, marchitas.


No se pueden recuperar en la soledad, ni en las palabras ahogadas,

una mirada encendida de sueños ni una caricia entre lágrimas perdida….


Ahora…


Saborea conmigo este néctar purpura de la pasión apagada,

de la melancolía agotada,

saborea conmigo esta amarga hora, que resarce los dulzores

de mis historias abandonadas.


Oh pequeño, es que ahora ya no cantas?

Bah… que podría hacer una boca muda cuando no

se recuerda ni como se desangraban las cartas.


Ya pequeño, ándate a dormir,

ya pequeño, déjate dormir…

pero ten cuidado con los sueños…

con ellos, mucho, mucho cuidado.


mira, mira ese dragón, quiere volar. Mira! mira esa serpiente, tiene sus fauces bien abiertas!, ese camino, ese duende como salta! mírala a ella... esta lejos... pero llora! ... corre!

NUESTRO RÉQUIEM. ( LETANÍAS DE UN SUEÑO ROTO POR INSUFICIENCIA… )

La noche que anunciaron los arpistas clandestinos se alejó de las esperanzas y nuestro bosque quedo huérfano y sus sueños marchitos.

Las historias que germinaban de mi austero armisticio, para calmar tus penas y elevar mi espíritu se apagaron mudas, frugales entre el abandono y el olvido.

Cada ilusión y cada romanza ya fueron ignoradas en pro de tu placidez y abolengo. Cada pasión ha sido cruelmente ahogada entre el tiempo y el desespero.

Los cervatillos yacen cojos y no saltan por la nieve, los lobos se enferman, las flores se marchitan y ya no crecen y endúlcensen, el aire se estanca y se vuelve parco su murmullo; las estrellas al valle no bajan, se guardan juiciosas su luz y su arrullo.

Si el hada se olvida y se marcha sonriendo, el cuentero puede morir tranquilo entre mordazas y mentiras o nuevos anhelos.

El hada se ha reencontrado con su valle viejo, entonces ya mas no necesita de aquellos lamentos hirientes de viento nuevo; ni el invierno, ni las hojas cayendo, ni los primaverales aromas ardiendo; irán a estorbar a su maldito infierno veraniego.

Allí tú te regodeas entre esa gloria de nuevos y viejos sueños, desde acá mi llanto no se oye y sonrío con el abrigo de los armiños y en mi bosque perpetuo, viéndote sosegada en susurros y ajenos cuentos.

En la campiña y el cabaré, el ermitaño y el bohemio, encontrarán abrigo de aquél agudo y subterfugo desconsuelo y podrán mantenerse respirando tranquilos y bebiendo un poco de ajenjo, porque te saben sonriente en manos del opio en la firmeza de su suelo.

Un-aleatory noises

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